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Linaje gastronómico: lo que se comparte mientras se cocina

Comunidad

La cocina como herencia viva

Cada vez que se enciende un comal, se destapa una olla o se coloca pan sobre la mesa, se activa una memoria colectiva. Cocinar no es solo transformar ingredientes: es transmitir afectos, secretos familiares y saberes que han pasado de generación en generación. En México, donde la comida es patrimonio cultural, los platillos no se entienden sin el linaje que los respalda.

De acuerdo con la UNESCO, la cocina tradicional mexicana —en particular la michoacana— fue reconocida en 2010 como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Esto no solo se debe a sus técnicas, sino a su capacidad de articular comunidad: sembrar, cosechar, preparar y compartir se convierten en prácticas de identidad.

Lo que se comparte en la preparación

El linaje gastronómico no se reduce al plato terminado, sino a lo que ocurre mientras se cocina. Entre aromas y texturas, emergen conversaciones, consejos y recuerdos. La sobremesa empieza incluso antes de sentarse a comer.

En muchos hogares, la abuela enseña cómo distinguir el punto exacto del nixtamal, el padre transmite el modo de preparar un asado dominical, y los niños aprenden entre risas a batir chocolate o a hacer tortillas. En esos gestos se construye comunidad, se refuerzan vínculos y se fortalece la memoria familiar.

Un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) sobre prácticas culinarias comunitarias señala que cocinar en colectivo “no solo fortalece la transmisión cultural, sino también el sentido de apoyo mutuo”. Es decir, la cocina se convierte en un espacio de educación informal y de cohesión social.

Tianguis, mercados y el sabor y saber compartido

Los mercados y tianguis también son escenarios de este linaje. Ahí no solo se adquieren ingredientes: se aprende qué chile es mejor para la salsa, cómo elegir maíz de temporada o por qué cierto pan se hornea en fechas específicas.

En Cholula, los tianguis semanales mantienen esa tradición de intercambio cultural. La experiencia de recorrerlos no es solo comercial, sino también comunitaria: se comparten recetas, se recomienda al productor de confianza y se sostiene una red de vínculos que da identidad al territorio.

Cocinar como acto de pertenencia

Cocinar juntos no solo satisface el hambre; también nos hace sentir parte de algo más grande. En tiempos donde lo digital a menudo sustituye el encuentro físico, la cocina permanece como espacio tangible de conexión. Preparar un platillo en compañía se vuelve una forma de resistir al aislamiento y de reafirmar nuestra pertenencia a una historia común.

Quizá por eso, tantas iniciativas contemporáneas —desde colectivos gastronómicos hasta talleres comunitarios— rescatan la cocina como vehículo de integración social. En cada platillo hay un relato que habla de quienes lo cocinaron, lo compartieron y lo disfrutaron.

Gran Atrio: un punto de encuentro gastronómico

En Gran Atrio celebramos ese linaje gastronómico con una propuesta culinaria diversa y consciente:

  • Vaniloquio: exquisito restaurante que ofrece una variedad de platillos con fusión de la cocina mexicana, asiática y mediterránea. Además, brinda maravillosas vistas de Cholula y un tributo a la tierra que consagra esta experiencia gastronómica.
  • Sukel: transporta tu paladar al legítimo sabor libanés, con platillos del Medio Oriente elaborados con ingredientes de alta calidad.
  • Friki Cholula: pasión por la genuina cocina mexicana en desayunos, brunch, panadería artesanal, menú de comidas y mixología.
  • Casa Myz: un espacio social consciente donde se nutre el cuerpo, se estimula la mente y florece la comunidad. Disfruta de sus smoothies y platillos saludables.

Así, cada visita a Gran Atrio es también una oportunidad de conectar con la riqueza de lo que se comparte mientras se cocina.

Fuentes utilizadas en la realización de este blog:

  • UNESCO (2010). La cocina tradicional mexicana, cultura comunitaria, ancestral y viva – el paradigma de Michoacán.
  • UNAM, Instituto de Investigaciones Sociales (2022). Prácticas culinarias y comunidad en México. INEGI (2023). Cuenta Satélite de la Cultura
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