Estamos viviendo una era en la que la tecnología puede llegar a ser abrumadora e incluso, afectar a tu salud mental. Sin importar las actividades diarias, las redes sociales se han vuelto necesarias para nutrir la comunicación entre amigos y familia, sostener la relación de tus clientes con tu trabajo,hasta mantenerte informado de las noticias de tu entorno.
A pesar de su popularidad, las redes sociales pueden afectar grandes rasgos de nuestra salud mental. Estudios recientes han revelado que un uso excesivo puede causar depresión, ansiedad, baja autoestima, hiperactividad, pérdida de atención a otras actividades y un daño a tu calidad de sueño.
¿Por qué son adictivas? Se ha comprobado que las redes sociales tienen una naturaleza de refuerzo. Su uso activa el centro de recompensa del cerebro al liberar dopamina, es por eso que las encontramos tan adictivas.
Como mencionamos anteriormente, las redes sociales se han vuelto cruciales para nutrir nuestras relaciones de amigos, familia y trabajo. Es por eso que cortarlas de tajo suena como una solución con estándares imposibles, sin embargo podemos monitorear nuestro comportamiento y así crear rutinas básicas.
Te compartimos 5 tips para utilizar de manera saludable estas herramientas:
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Mantén tus comunidades amables y saludables: Las redes sociales están repletas de trolls y comentarios agresivos e innecesarios. Filtrar los comentarios y contenido que consumes te ayudará a crear comunidades y canales de comunicación saludables.
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Vive el momento: Las fotos y vídeos tienen su lugar, pero mantenernos presentes es indispensable para tus conexiones y experiencias.
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Conecta, no compares: Compararte con otras personas puede ser un detonante de pensamientos intrusivos a largo plazo. No te presiones, todos tenemos un ritmo y tiempo diferente en nuestras vidas. Conecta con tus seres queridos.
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Depura lo que ves: Sigue a las personas y cosas que te traen alegría. Gran parte del contenido de las redes sociales está altamente seleccionado y puede representar estilos de vida y actitudes que no existen.
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Toma un descanso sí lo necesitas: Un descanso siempre te ayudará a dar espacio a tus emociones, haz algo que ames y te haga sentir bien. ¡Una caminata al aire libre o disfrutar de un libro pueden ser una gran idea!
No luches solo. Sí estás experimentando ansiedad, depresión, problemas de atención o cualquier otro problema más profundo relacionado con el uso excesivo de las redes sociales, pide una cita para hablar con alguien que pueda ayudarte a sentirte mejor de nuevo.